La morcilla asturiana es un tipo de embutido muy popular en la región española de Asturias. Se elabora con sangre de cerdo, grasa y cebolla y se condimenta tradicionalmente con ajo y pimentón.
La mezcla se envuelve en una tripa natural y se cuece a fuego lento hasta que esté firme al tacto. El producto terminado tiene un sabor rico y ligeramente dulce y una textura suave y aterciopelada.
La morcilla asturiana suele servirse como parte de un almuerzo tradicional asturiano, junto a patatas, huevos y queso. También puede cortarse en rodajas y freírse, y servirse como acompañamiento de carnes a la parrilla o verduras asadas.
Tanto si la disfrutas sola o como si forma parte de una comida principal, la morcilla asturiana seguro que satisface tu apetito.
¿Qué es la morcilla asturiana?
Originaria de la región española de Asturias, la morcilla asturiana es un tipo de embutido que se disfruta desde hace siglos. La morcilla se elabora con sangre de cerdo, cebolla, grasa y especias, y suele cocinarse en una tripa hecha con los intestinos del animal.
Aunque los ingredientes y las proporciones exactas pueden variar según la región y la receta familiar, el resultado final es siempre un embutido rico y sabroso que se disfruta en toda Asturias.
En los últimos años, la morcilla asturiana ha empezado a ganar popularidad fuera de su región de origen, y ahora se puede encontrar en muchos supermercados y carnicerías españolas.
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Si buscas una experiencia culinaria única y deliciosa, no dejes de probar esta especialidad asturiana. ¡Buen provecho!
Historia de las morcillas asturiana
La historia de la morcilla asturiana es larga y con tradición. Esta morcilla tradicional se elabora desde hace siglos en la región asturiana en el norte de España. Se desconocen los orígenes exactos del plato, pero se cree que se remonta a la Edad Media.
El nombre de «morcilla» probablemente procede de la palabra latina que significa «sangre», mientras que «asturiana» se refiere al pueblo asturiano.
Tradicionalmente, la morcilla se hacía con sangre de cerdo, cebollas y arroz. Sin embargo, las recetas modernas suelen llevar ingredientes adicionales, como ajo, pimentón y pimienta negra.
Sin embargo, hay muchas variaciones del plato, y algunas recetas incluyen arroz o alubias. La morcilla suele cocinarse en una olla o cazuela, y suele servirse con una baguette crujiente.
El embutido suele hervirse o asarse antes de servirse. Se suele comer con otros platos tradicionales asturianos, como la fabada o los cachelos.
La morcilla es una parte vital de la cultura y la cocina asturiana. Este delicioso embutido seguro que satisface cualquier apetito.
¿Cómo se elabora?
La morcilla es un plato tradicional asturiano hecho con sangre, grasa, cebollas y especias. Los ingredientes se mezclan y se embuten en una tripa, normalmente de cerdo.
El embutido se cura durante varias semanas antes de estar listo para su consumo. Cuando se sirve, se suele cortar en rodajas gruesas y se asa o se fríe. La morcilla asturiana suele servirse con patatas o pan.
También puede utilizarse como ingrediente de otros platos, como guisos o estofados. Aunque no es el más atractivo de los platos, su rico sabor ha hecho que sea una opción popular entre los asturianos durante siglos.
Morcilla de Atilano Anllo
¿Cómo se come la morcilla asturiana?
La morcilla asturiana es un alimento único y delicioso que puede combinarse con muchos otros platos.
Para el desayuno, es habitual freír la morcilla junto con los huevos para tener un plato fácil de comer, añadiendo además tomate para darle más sabor. Incluso puede que prefieras comer tu asturiana salteada sobre arroz (o patatas) condimentada con especias como semillas de comino y rematada con aceite de oliva, ¡lo que constituye una sabrosa comida!
La morcilla asturiana como aperitivo
Aunque suele comerse como plato principal, la morcilla asturiana es también un aperitivo popular en muchos restaurantes españoles. El embutido se cuece y se ahuma. Mucha gente disfruta del rico sabor de la morcilla, y suele servirse con un vaso de vino tinto.
Si buscas un aperitivo único, merece la pena probarla.
La forma más habitual de prepararla es frita, aunque también puede hacerse al horno o a la plancha. Suele servirse con una ensalada, patatas o pan.
La morcilla asturiana como plato principal
La morcilla como plato principal, es un alimento para el almuerzo a base de sangre, grasa y cebolla.
Suele servirse con huevos fritos, patatas y pan recién hecho. Muchos creen que la mejor manera de disfrutar la morcilla es con un vaso de vino tinto de la zona.
Con el tiempo, las recetas de morcilla han evolucionado, y hoy en día hay muchas versiones diferentes del plato, cada una con su propio sabor.
Si alguna vez estás en la región de Asturias o León, ¡no dejes de probar sus morcillas!
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